PACHU SE LLEVA EL PRIMER BILLETE PARA EL DUELO FINAL

Pachu, Candela, Josetxo y Paula, los 4 finalistas de Masterchef Junior, entraban en cocinas por última vez en esta edición. Una radiante Eva González recibía a los minichefs vestida con un espectacular atuendo romano. Ella era la encargada de presentar a los jueces, que se encontraban detrás del escaparate simulando a personajes de la antigua Roma.

Los aspirantes, entonces, tenían que encontrar en la sala diferentes alimentos que se utilizaban en la antigua Roma. Huevos, cerdo, leche… estos serían los ingredientes con los que tendrían que realizar su primer plato de la noche. Antes de empezar con la primera prueba, sorpresa típica de una final: una carta de sus seres queridos. Josetxo recibía una misiva de su entrenador de fútbol, Pachu de una amiga suya, la tía de Paula también le enviaba una carta a su sobrina y Candela, la más emotiva de todas, recibía un mensaje de su padre.

Con los nervios a flor de piel, empezaba la gran final. Ángel León, chef del restaurante Aponiente (Cádiz) y poseedor de 3 estrellas Michelin, era el encargado de dirigir la primera prueba, la cual decidiría al primer duelista final. Los concursantes tenían que seguir los pasos del chef jerezano para replicar tres de sus platos estrella basados en la cocina marina. Y es que León fue el primer chef del mundo en introducir el plancton en un menú de restaurante. Debido seguramente a la complicación del cocinado, los concursantes iban bastante perdidos con las indicaciones de León. Paula daba órdenes constantes y se quejaba, junto a la desatención de Josetxo. Candela, la más pequeñita de la partida, era la que estaba más tranquila, pero a la vez la más infortunada. Pues a tan solo 2 minutos del “manos arriba”, el caldo de uno de los platos se le caía al suelo, por lo que Candela rompía a llorar.

Las lágrimas de Candela –y las de Pachu- en la cata del jurado, no entorpecían la ilusión de los niños al ver la fluorescencia de la luz abisal, uno de los platos que cada concursante tenía que presentar. Finalmente, la propia Pachu, que no se lo esperaba para nada, transformaría las lágrimas de tristeza en un llanto de felicidad y se proclamaría vencedora de la prueba. Así, la junior madrileña se quedaba la primera chaquetilla de duelista final. A los otros tres niños, aún les quedaría una segunda oportunidad para pasar al gran duelo final: la prueba exteriores en el famoso restaurante DIVERXO.