El show de María Jesús Ruiz en GH DÚO

Los concursantes llevan encerrados en la casa más de dos meses y el agotamiento puede con ellos. En varias ocasiones Kiko Rivera ha empezado a amenazar con marcharse. Las peleas entre ellos empiezan a ser constantes y es que estar encerrados 24 horas del día sin tus familia ni amigos ni tan siquiera un rato de intimidad y tranquilidad puede ser un infierno. Algunos como María Jesús Ruiz tienen los nervios a flor de piel y están susceptibles a cualquier emoción.

En alguna ocasión Irene Rosales se ha venido abajo recordando a sus pequeñas, pero esta vez le ha tocado a María Jesús Ruiz. No ha sido casualidad, todo estaba preparado. La ex miss España se encontró con un objeto dentro de la casa que le resultó familiar y no pudo contener las lágrimas. Mientras hacia la colada se encontró con el tapón de un biberón. «¿De quién es esto? Un biberón», decía entre lágrimas mientras lo miraba perpleja, «Oh, un biberón», continuaba llorando, «me lo quiero quedar». «Esta tía está loca», escribieron en redes tras ver el número que montó por un tapón. 

Inmediatamente fue al confesionario para preguntar si se lo podía quedar. «Me he encontrado el tapón de un biberón, ¿me lo puedo quedar? Es igual que el que usan mis niñas, no se de dónde ha salido pero es justo la marca que uso yo». Lógicamente le recordó al de sus hijas. 

«No se si la han tirado de fuera… Pero me ha dado mucha alegría, me lo quiero quedar», expresó cargada de emoción. Y confesó «mi vida normal es entre chupetes, biberones y pañales». Al final se lo ha quedado. «Me lo guardo donde nadie lo vea», le dijo al Super.

«Una simple pieza de plástico el bien que me hace… Me ha trasladado, esto me lo ha puesto Dios… Las quiero muchísimo, más que a mi vida», ha dicho entre sollozos en el confesionario. María Jesús Ruiz no pasa por su mejor momento dentro de la casa y ha demostrado echar de menos a sus pequeñas.