Nuevo batacazo para Isabel Pantoja

Los Pantoja están por todas partes. El clan ha conseguido desbancar a otro de los más importantes de la televisión, Las Campos. A día de hoy ninguno de los dos pasa por un buen momento. Las respectivas matriarcas no paran de recibir varapalos. Isabel Pantoja se enfrenta a un nuevo problema después de las tensiones con Chabelita y Dulce, el robo de Cantora, los problemas con las drogas de Kiko Rivera y la cancelación de su gira por Latinoamérica. 

 El juez ha desestimado la demanda que interpuso contra las Mellis por vulneración del derecho al honor y a la intimidad. La cantante las demandó por lucrarse hablando de su vida privada. Como testigo contaba con Kiko Rivera, aunque finalmente este no tuvo que abanadonar la casa de GH DÚO para asistir al juicio. 

Esta demanda tiene como a clara protagonista a Dulce, la niñera de Chabelita y la archienemiga de Isabel Pantoja. Raquel y Bibi aseguraron que había un acoso por su parte hacia la exniñera de la familia. «Isabel Pantoja discutió con Dulce y llegado un punto le dijo que fuera con cuidado porque la podía arrastrar escaleras abajo… Le hablaba muy mal, nosotras estábamos delante. Y Dulce se ha volcado con la niña al cien por cien», dijeron en una entrevista. Unas palabras que no gustaron en absoluto a la tonadillera. 

La cantante tomó medidas legales y les interpuso una multa de 350.000 euros. Un dinero que le vendría muy bien para pagar sus deudas de Cantora, pero que finalmente no ha conseguido. Ana Rosa Quintana, esta misma mañana, ha sido la encargada de dar la mala noticia a Isabel Pantoja. El Ministerio Fiscal ha pedido la desestimación de la demanda. 

Sálvame también se ha hecho eco de la noticia y sacaron a la luz unos audios de Isabel Pantoja con un buen amigo suyo donde le confesaba su estado anímico. La tonadillera ha tocado fondo. «Pedro estoy hecha polvo, te agradezco mucho que me hayas mandado estos mensajes. Me cuesta respirar, porque yo he sido y sigo siendo una buenísima persona y he sido con ella esplendidísima. Yo esto lo arreglaré de mujer a mujer. Mi corazón ya no es el mismo, ni yo soy la misma Isabel. El daño ha sido muy malo».